29/03/2017 8:00:37
Por medio de una carabinera, los niños que tenían 10 y 12 años el día del ataque, contaron detalles de la jornada en que su madre fue agredida. En el ataque le sacaron los ojos.
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Los hijos de Nabila Rifo, de 10 y 12 años el día en que fue brutalmente agredida en Coyhaique, declararon por medio de una carabinera que expuso el testimonio de los niños ayer en el juicio que se lleva a cabo en Coyhaique por el femicidio frustrado. Según contaron los dos hijos mayores de los cuatro que tiene la mujer; Mauricio Ortega era violento con ella. Ortega, padrastro de ambos, es el único sospechoso del ataque. "Le gritaba 'maraca', le decía cosas con rabia. Que la iba a matar. Trataba de pegarle, pero los amigos lo tomaban", narró la uniformada sobre el día de la tragedia. Según El Mercurio, la carabinera Nicole Huinca, también le tomó declaración a un testigo presencial del ataque: "Sólo era un hombre, con ropa ajustada al cuerpo. De estatura alta, de aproximadamente 1,80 a 1,75 metyros y de contextura delgada", reiteró el joven por medio de la uniformada agregando que la agresión fue a eso de las 5:50 y que tras pegarle, el hombre se devolvió a sacarle los globos oculares a la víctima. Ese relato lo ha usado la defensa, pues Ortega mide 1,50, es de contextura gruesa y según declaraciones, vestía ropa clara ese día. En desarrollo
Por medio de una carabinera, los niños que tenían 10 y 12 años el día del ataque, contaron detalles de la jornada en que su madre fue agredida. En el ataque le sacaron los ojos.
Los hijos de Nabila Rifo, de 10 y 12 años el día en que fue brutalmente agredida en Coyhaique, declararon por medio de una carabinera que expuso el testimonio de los niños ayer en el juicio que se lleva a cabo en Coyhaique por el femicidio frustrado. Según contaron los dos hijos mayores de los cuatro que tiene la mujer; Mauricio Ortega era violento con ella. Ortega, padrastro de ambos, es el único sospechoso del ataque. "Le gritaba 'maraca', le decía cosas con rabia. Que la iba a matar. Trataba de pegarle, pero los amigos lo tomaban", narró la uniformada sobre el día de la tragedia. Según El Mercurio, la carabinera Nicole Huinca, también le tomó declaración a un testigo presencial del ataque: "Sólo era un hombre, con ropa ajustada al cuerpo. De estatura alta, de aproximadamente 1,80 a 1,75 metyros y de contextura delgada", reiteró el joven por medio de la uniformada agregando que la agresión fue a eso de las 5:50 y que tras pegarle, el hombre se devolvió a sacarle los globos oculares a la víctima. Ese relato lo ha usado la defensa, pues Ortega mide 1,50, es de contextura gruesa y según declaraciones, vestía ropa clara ese día. En desarrollo